1.- Evaluación y planificación del tratamiento: Los fisioterapeutas especializados en rehabilitación pulmonar realizan evaluaciones exhaustivas para determinar la función pulmonar, la capacidad de ejercicio y los factores que limitan la actividad física en cada paciente. Con base en esta evaluación, desarrollan planes de tratamiento personalizados que abordan las necesidades específicas de cada individuo.

2.- Entrenamiento en técnicas de respiración: Los fisioterapeutas enseñan técnicas de respiración específicas diseñadas para mejorar la ventilación pulmonar, la eficiencia respiratoria y el control de la disnea (falta de aliento). Estas técnicas pueden incluir la respiración diafragmática, la respiración controlada y la técnica de los labios fruncidos, entre otras.

3.- Ejercicio supervisado: Los programas de ejercicio supervisado son una parte integral de la rehabilitación pulmonar, y los fisioterapeutas juegan un papel clave en la prescripción y supervisión de estos ejercicios. Esto puede incluir ejercicios de resistencia, entrenamiento de fuerza y ​​acondicionamiento cardiovascular adaptados a las necesidades y capacidades individuales de cada paciente.

4.- Terapia de limpieza de las vías respiratorias: Algunas enfermedades pulmonares crónicas, como la EPOC, pueden causar acumulación de mucosidad en las vías respiratorias, lo que dificulta la respiración. Los fisioterapeutas utilizan técnicas de limpieza de las vías respiratorias, como la percusión y la vibración, para ayudar a movilizar y eliminar la mucosidad de los pulmones, facilitando la respiración.

5.- Educación y apoyo: Los fisioterapeutas proporcionan educación sobre la enfermedad pulmonar, los factores desencadenantes de los síntomas y las estrategias de autocuidado para manejar la enfermedad de manera efectiva en la vida diaria. También ofrecen apoyo emocional y motivacional para ayudar a los pacientes a mantener un estilo de vida activo y saludable.